jueves, 26 de noviembre de 2015

Hablemos de infertilidad

Como algunos de ustedes saben, tener al changuito fue toda una odisea emocional y hoy quiero compartirles este post que me tardé 1400 años en escribir....

Hace más de 9 años, un día el argentino y yo decidimos que era momento de dejar de cuidarnos y que si pegaba pronto seriamos felices y si no, seguiríamos disfrutando de ser una pareja. El tiempo fue pasando, los años fueron pasando y no pegaba y yo empezaba a preocuparme. 

Hace 6 años nos dijeron que algo andaba mal y se me cayó el mundo, no hicimos mensos ignorando el tema lo más que pudimos y hace casi 4 años fuimos con un especialista de fertilidad a ver que pasaba y dos años después acabamos la pruebas que nos darían el veredicto y no porque así sea el proceso, sino que cada una de las pruebas era un reto emocional más y otra mala noticia más que escuchar y un paso más cercano a escuchar la verdad que tanto miedo tenía de oír, era como estar esperando un veredicto, donde te van a dar una noticia que puede ser fatal o que puede ser buena… la incertidumbre es horrible.

Después de más de 8 años de incertidumbre, finalmente supimos qué pasaba, teníamos todas las estupideces que por sí solas no causan infertilidad pero todas juntas hacían que embarazarme fuera casi imposible, y que en nuestro caso la mejor opción sería una fertilización in vitro… Te dicen eso y qué?, ¿ Qué dices?, ¿Qué piensas?, lo siguiente que sabes es que estas en un cuarto aparte recibiendo papeles y listas de estudios para el siguiente paso y que te estás dando cuenta de que si quieres tener un hijo, una de dos, o te sacas el melate o te mega endeudas, para pagar una posibilidad de ser padre, porque eso si, te avisan que es una posibilidad y que puede no pegar por una módica cantidad de como 1564 millones.

En nuestro caso, el argentino y yo sin pensarlo, decidimos que debíamos intentarlo, que si no lo hacíamos en un futuro nos íbamos a arrepentir. 

Pase por mil estados de ánimo, lloré, me enojé, maldije a todas las madres que conocía, le busqué el humor negro y busqué apoyo, bueno hasta le escribí a Bill Gates, que por cierto me respondieron diciéndome que lo sentían mucho pero que su fundación no apoyaba causas personales… fue un momento horrible, sobretodo tenía coraje y frustración, mucha frustración, hasta que empezamos a buscar soluciones, conseguimos un préstamo y así por azar del destino justo antes de empezar el proceso, me embarace y le conté al argentino de la peor forma posible, ósea por teléfono.

Yo no lo podía creer, nos habían dicho que era  casi imposible que pasará, no quise hacerme ilusiones hasta que oí el latido del corazón del changuito y ahí encontré paz y una tranquilidad de que todo estaría bien, no se porque pero estaba convencida de que después de tantos años de pasármela tan mal todo estaría perfecto y gracias a dios así fue. Hoy después de una búsqueda de más de 8 años, tengo un changuito de casi un año que no vino con torta bajo el brazo, pero si nos ahorro una fortuna que no teníamos.

En fin, fue un camino largo muyyyyyyy largo y en nuestro caso tuvimos un final muy feliz, pero fue muy duro, se los comparto para que sepan que no están solas, de hecho platicando con mis amigos, resulta ser que la gran mayoría de nosotros tuvo problemas para tener hijos (claro, que somos bien rucos, nosotros somos los más jóvenes creo, y tenemos 37 y 38) pero aquí estamos, en un proceso todos y ya varios hemos tenido éxito, con in-vitro, con suerte y con adopciones. Todos lo hemos enfrentado de distinta manera, pero el común denominador es que es un proceso que lastima y asusta, que pocos comprenden y que hay que tener mucho ánimo y fuerza para salir de el.


Les dejo algunas recomendaciones basándome en lo que yo sentía:

SI LO ESTÁS VIVIENDO TU:

 No le cuentes a todo México que empiezan a buscar bebe, si por ahí se alarga o se complica la búsqueda, es muy doloroso que te estén preguntando para cuando.

 Si no pega y te preocupa, ve a un médico especialista en eso, no pierdas el tiempo con tu ginecólogo, urólogo, endocrinólogo o que se yo, ve con alguien que sea especialista en eso. Yo les recomiendo RMA; a nosotros nos atendió la doctora Martha Luna y es excelente, además ella atendió a 3 personas cercanas que lo lograron.

 Si van a hacer estudios, pregunta a tu médico en qué laboratorio hacer las pruebas y aunque sea más caro, hazlo ahí, yo me hice dos histeros en parte por esto. Les recomiendo muchísimo Biomédica de Referencia.

 No te culpes. La infertilidad es una hija de ·&$#@ que no discrimina, no hay ninguna razón, ni hiciste nada, ni comiste nada, ni fue porque te cuidaste mucho tiempo, ni tienes la culpa en lo más mínimo y no te sientas menos, eres igual mujer que todas.

 Mantén la calma, no estás sola. Platica con gente que haya vivido algo similar, son el mejor apoyo.

 Cruza un puente a la vez. No quieras saber tu respuesta si es que te dicen que no puedes tener hijos, ve cruzando un puente a la vez, primero haz tus estudios, después escucha lo que te digan, después conoce tus opciones, después piénsalo y toma la decisión de que camino quieres seguir. Yo al principio me agobiaba muchísimo por que la adopción me daba miedo, pero después entendí que primero había que ver si íbamos a llegar al momento de tomar esa decisión.

 No dejes pasar tiempo, yo dejé que pasaran años entre estudios y noticias y la verdad fue un error, el día que me dijeron que pasaba, se me cayó el mundo pero también encontré paz al saber que era lo que iba a pasar. La incertidumbre es lo peor.

 Si las noticias son malas, acuérdate que sigue habiendo opciones, tres personas queridas y cercanas han adoptado bebes y niños y hoy son muy felices con su familia. Simplemente el camino fue diferente.



SI ALGUIEN CERCANO LO ESTA VIVIENDO:


• Piensa antes de hablar. No seas el imbécil que dice: 
Dios sabe porque hace las cosas”, 
“Mi prima se embarazo en cuanto adopto”,
“Ya llegará tu momento”
“¿Ya probaste las pastillas de no se que? Son mágicas....”
“Tranquila, mientras estés estresada no va a pegar”
“¿Porqué no adoptan?”
“Se como te sientes…”
“Te regalo a mis hijos, si quieres…”



y mil cosas más. Recuerda que tu manera de entenderlo no es igual, no lo has vivido y es un sentimiento muy primitivo… lidiar con temas de infertilidad es un mundo emocional muy duro que te cuestiona todo y te saca lo más básico de ti, navegas entre sentimientos absurdos y la razón. Así que escucha y abraza y si quieres decir algo, di cosas que consuelen, que hagan notar lo mucho que quieres a esa persona y como deseas lo mejor para ella. 
Cosas como: "te quiero", "puedo hacer algo por ti?", "¿quieres hablar?", "ojalá hubiera algo que pudiera hacer para que te sientas mejor" y cosas así ayudan.

 Entiende si no quieren hablar del tema. Una de las cosas que yo hice fue dejar de hablar del tema. Bueno en realidad lo hablaba con muy poca gente, mi tía/amiga fue clave para mi, pero ella vivió lo mismo, así que me entendía perfecto.

 No estés preguntando. Estate ahí por si quieren hablar contigo, pero no preguntes a cada rato que ha pasado.

 No des consejos, que no hayas vivido. Nadie quiere escuchar como en el radio dicen que hagas no se que… o que en Facebook viste que si blablabla…

 Sé tu mismo, no trates diferente a la persona, si vives algo lindo cuéntaselo, si te embarazas cuéntaselo, si tus hijos hicieron algo lindo, cuéntaselo. Lidiar con estos temas no hace que no  nos de felicidad por la gente que queremos.

 Invita a tu amiga a hacer lo mismo de siempre, ofrece acompañarla a los estudios, al cine, que se yo, ayuda a que esa persona se distraiga.






martes, 17 de noviembre de 2015

10 cosas en las que ser mamá me ha cambiado

El otro día viéndome al espejo me di cuenta que tengo unas ojeras que con un poco de pena admití que no se me quitarán nunca y viviré con ellas el resto de mi vida y me hizo pensar en todo lo que he cambiado desde que el changuito llego a nuestras vidas y estas son algunas cosas qué note:

1. No volveré a ver mis ojos sin ojeras... pero podré probar una montón de correctores de ojeras hasta encontrar el adecuado.

2. Ahora me visto más cómoda (y fodonga me imagino que diría mi marido), pero tengo una relación muy cercana con mis tenis... tacones... si como no.

3. Hablar en tercera persona es parte de mí... ya se, no tiene sentido, pero ahora le digo al changuito... "espérame que mamá no usa pañal", "mamá también tiene hambre", y así mamá es una tercera persona y yo cada vez menos cuerda.

4. Conocí la paciencia y los limites flexibles. Desde que nació el changuito me tiene impresionada como tus límites se van estirando y en un pasado cuando hubieras renunciado a algo, ahora aprendes a esforzarte más y más y más.

5. Me hace mejor persona o limitarme. Un buen día veníamos caminando y le digo al changuito: "Vamos a tener que ir a la tienda de la ladrona" y cuando terminé de decirlo me di cuenta que lo que había dicho y de que es justamente lo que no le quiero enseñar al chango, así que trato de ser más consciente de las cosas que digo y de los juicios que emito, lo cual no se si me hace mejor persona o por lo menos una persona más prudente.

6. Manejo mejor... Aja, me he relajado un poco para manejar, evito hacer cosas bruscas por el miedo a chocar con un changuito a bordo. También la única vez que le grité a otro coche casi lo mato del susto, así que también es algo que he ido cambiando.

7. Como mucho mejor. Una de las cosas que me han funcionado para la comida es comer juntos y tratar de que el coma lo mismo que nosotros, lo que obvio nos ha llevado a comer muchísimo más sano... ahora todos los días comemos verduras y fruta.

8. Mis uñas son un desastre... obvio hay prioridades en la belleza, primero tener tiempo de bañarse e ir al baño con calma, después peinarse y pintarse, depilarse en un hit y obvio para las uñas ya no hay tiempo ni de chiste. A mi no me vengan, todas las mamas que tienen uñas cuidadas o tienen muchacha o nana y admito que veo mis uñas y a veces las envidio.

9. Mi calidad de esposa bajo. Durante 12 años, nos fuimos a la cama y le rascaba la espalda al argentino para dormirnos, hoy tiene suerte si le digo buenas noches, cocino menos para nosotros y soy mucho menos detallista, afortunadamente él ha sido comprensivo con estas cosas y lo que sentimos sigue estando presente.

10. Que hipersensibilidad!!!! Que horror, siempre he tenido un humor negro y solía ser mucho menos sensible, ahora desde que el changuito nació, lloro hasta con los anuncio cliché, como este de Alpura Kids, que sigue la receta clásica del anuncio para mamás.

Ahora lloró con las noticias, con las películas, con la gente en la calle, con los anuncios... chale. 



Y bueno, también debo decir que conocí un nuevo tipo de amor que me llena y me hace muy pero muy feliz. 

jueves, 5 de noviembre de 2015

De quesos de Oaxaca, diarreas y culpas.

Pues resulta ser de tal suerte que una de mis amigas de la prepa se casó en Oaxaca, y como el argentino no es fan de las bodas, yo vi este evento como una oportunidad de un fin de semana para que el changuito y papa convivieran al 100% y tuvieran quality time solitos, mientras yo me la pasaba bomba con mis amigos de la prepa... y tal cual.

El argentino y el changuito se la pasaron padrísimo, se fueron a Valle con los abuelos, fueron a una fiesta el domingo y se disfrutaron mucho, y yo disfrute muchísimo un fin de semana con amigos, sin prisas, sin agobiarme de nada y durmiendo!!!!! que aunque abandoné a mis amigos en un bar el primer día y en un karaoke el segundo, tenía que aprovechar para dormir sin interrupciones, ni la luz del monitor en los ojos. La boda estuvo re linda y con mis amigos de la prepa fue un reencuentro rico, divertidísimo, de esos que te dejan con un buen sabor de boca.

Paseamos, caminamos, fuimos de shopping artesanal y aproveché para comprarle un par de cosas al changuito, un overol de manta bordado a mano bien bonito y unos juguetitos de madera y en el aeropuerto compré un queso oaxaca para traerle a mi hermano y para casa, así que compre uno grande y feliz me lo traje. Llegue a casa el domingo, tardísimo, todos dormidos :(  nadie me recibió, me hice unas quesadillas y me dormí. Al día siguiente como que me dolía un poco la panza, pero no le di importancia, así que a la hora del desayuno, repetí la cena, le servi al changuito en su hermoso ezpz, trozos de fruta, cereal y pedacitos de queso oaxaca.

Pasó el día perfecto, y en la noche por ahí de las 11, siento ruidos raros saliendo del monitor como de que mi hijo se ahogaba, corrí a su cuarto y me encontré con una escena digna de película de terror, mi hijo vomitaba como exorcizado, pero al estar acostado se atragantaba con su mismo vomito, yo apanicada lo levanté, me baño en vomito... un desastre. Total pasamos una hora infernal, le llamé a mi hermana la doctora y me dijo que estuviera alerta de que no tuviera fiebre, ni ningún otro síntoma, el pobre vomitó un par de veces más y después de un buen rato se pudo dormir tranquilo y al día siguiente pasmos a la fase dos: la diarrea del infierno...



Total para no hacerles el cuento largo intoxique a mi hijo con queso oaxaca...
Inconsciente de $@#%&!!! dirían algunos, como se te ocurre darle queso oaxaca, pero debo aclarar que no somos muy quisquillosos con la alimentación del changuito, hemos ido tratando de que coma de todo y nunca se me ocurrió que lo iba a casi envenenar con el queso.

Me sentí fatal... cada vez que veía sus pompis rozadísimas lloraba, cada vez que lo veía triste yo lloraba más. Esta cañón el sentimiento de culpa que sentí, que aunque se que es parte de las experiencias y que no es nada grave y que lo más probable es que nos vuelva a pasar me sentí la peor madre y eso me hizo esforzarme al triple para estar con él y apapacharlo lo más que pude en esos días.

Fueron 5 días de estar mal y al sexto finalmente empezó a mejorar, hoy 10 días después tengo un changuito casi al 100%, flacucho, peo bien. Que horror. Me hizo pensar en las mamas que tienen que enfrentar enfermedades serias de sus hijos y me hizo admirarlas muchísimo, yo con diarrea de días estaba emocionalmente agotada, así que me quito el sombrero por todas aquellas mamas que lidian con eso y con aquellas que lo hacen solas. Mis respetos.

Pero bueno al final aprendí un par de cosas y se las quiero compartir:

- No envenenar a tus hijos. Aprendizaje clave.... jejejeje.

- Cuando se enferman hay que estar tranquilo, ver que tiene, tratar de calmarlo y tener mucha calma, si te ven asustada, se van a asustar ellos.

- Hay que tener muchas pijamas, pantalones y monitos, o si no tener la lavadora a mano.

- Para el colchón de la cuna, le puse pañales de adulto abajo de las sabanas, los encuentras como predoblados o cubrecamas y son lo mejor, así si el batidillo es infernal quitas sabanas, tiras ese pañal y el desastre no llega al colchón. Lo mismo hago abajo de la funda del cambiador.

- Los bebes odian el suero vía oral o pedialite que fue lo que yo le estuve dando y no los culpo, sabe horrible. Los mejores que encontramos fueron de toronja (por mucho el más rico) el de Naranja-Mandarina y el de Lima-Limón. Ahora para dárselo utilice un popote duro, tipo los de pepsilindro. Lo metía en la botella, lo tapaba y se lo ponía en un boquita para ir liberando poco a poco el dedo y que el chango fuera tragando.

- Para las medicinas que también saben horrible, lo mejor es con jeringa, sin aguja obvio como tuvo a bien recomendarme un amigo... pero si de plano no se deja, usen la pose de tortura que es muy buena para estos casos y para gripas atroces donde hay que limpiar kilos de moquitos. La pose tortura es acostando al bebé boca arriba en tu cama, te sientas con las piernas abiertas y el en medio, de forma que su cabeza queda entre tus muslos, pasas sus bracitos abajo de tus piernas y de esta manera lo inmovilizas. Sé que es horrible, pero para estos casos es muy útil y necesario, no crean que soy una bruja malvada, a mi me la enseño una amiga y van dos veces que se la he agradecido muchísimo.

- Para las rozaduras, el pediatra me recomendó tenerlo encuerado un rato... aja, si aja, encuerado con diarrea... not funny, así que lo resolví poniendo un plástico en la cuna, y toallas viejas encima, de manera que se ensuciaba una toalla y a la lavadora y así pude juntar una emocionante cantidad de toallas viejas que hace mucho no se usaban, pero sirvió.

- Para las rozaduras también, que en este caso estuvieron del terror, hice tres cosas que le ayudaron mucho, tenerlo encuerado, que le ayudo a que secaran las rozaduras, después en la tina a la hora de baño puse aceite de hammamelis en el agua, y entre pañales use una vez capent, una vez pasta de lassar y así me fui alternándolas y funciono muchísimo.

- Tener bolsas de plastico a la mano... si el desastre esta canijo lo más comodo es limpiar y tirar sin tener que correr por el bote.

- Hacerte a la idea de que vas a tallar y tallar y tallar y tallar ropa muy sucia.

- Estar en contacto con el pediatra constantemente, para irle contando como va y que te vaya asesorando de que cuidar y como.

Y por ultimo... tener mucha, pero mucha paciencia. Espero no volverles a contar de enfermedades en mucho tiempo, yo por mi parte ya le prohibí a mi hijo volverse a enfermar...










domingo, 1 de noviembre de 2015

Freebies para decorar el cuarto del bebé

Esta semana ha sido un infierno con el changuito intoxicado, el pobre lleva una semana enfermo del estómago y yo he lavado más ropa con popis que la que creí ver en mi vida completa, así que aprovecho para pasarles algo que tenía guardado para estos casos en los que no puedo escribir mucho. 
Ya les contaré como va el changuito y como fue nuestra experiencia de la primera vez que se me enfermó de verdad.

Les platico: son posters para el cuarto del bebé, todos están listos para imprimirse tamaño carta, les recomiendo imprimirlos en alguna cartulina y con muy buena resolución, yo los imprimí en cartulina secant, funcionó en mi impresora de casa y quedaron muy bien, solo tengan cuidado que no les trabe la impresora. 
Todos los hice yo, menos el del alfabeto, así que aquí se los dejo, solamente hay que dar clic aquí para poderlos descargar.
Importantísimo mencionar que únicamente son para uso personal.