jueves, 5 de noviembre de 2015

De quesos de Oaxaca, diarreas y culpas.

Pues resulta ser de tal suerte que una de mis amigas de la prepa se casó en Oaxaca, y como el argentino no es fan de las bodas, yo vi este evento como una oportunidad de un fin de semana para que el changuito y papa convivieran al 100% y tuvieran quality time solitos, mientras yo me la pasaba bomba con mis amigos de la prepa... y tal cual.

El argentino y el changuito se la pasaron padrísimo, se fueron a Valle con los abuelos, fueron a una fiesta el domingo y se disfrutaron mucho, y yo disfrute muchísimo un fin de semana con amigos, sin prisas, sin agobiarme de nada y durmiendo!!!!! que aunque abandoné a mis amigos en un bar el primer día y en un karaoke el segundo, tenía que aprovechar para dormir sin interrupciones, ni la luz del monitor en los ojos. La boda estuvo re linda y con mis amigos de la prepa fue un reencuentro rico, divertidísimo, de esos que te dejan con un buen sabor de boca.

Paseamos, caminamos, fuimos de shopping artesanal y aproveché para comprarle un par de cosas al changuito, un overol de manta bordado a mano bien bonito y unos juguetitos de madera y en el aeropuerto compré un queso oaxaca para traerle a mi hermano y para casa, así que compre uno grande y feliz me lo traje. Llegue a casa el domingo, tardísimo, todos dormidos :(  nadie me recibió, me hice unas quesadillas y me dormí. Al día siguiente como que me dolía un poco la panza, pero no le di importancia, así que a la hora del desayuno, repetí la cena, le servi al changuito en su hermoso ezpz, trozos de fruta, cereal y pedacitos de queso oaxaca.

Pasó el día perfecto, y en la noche por ahí de las 11, siento ruidos raros saliendo del monitor como de que mi hijo se ahogaba, corrí a su cuarto y me encontré con una escena digna de película de terror, mi hijo vomitaba como exorcizado, pero al estar acostado se atragantaba con su mismo vomito, yo apanicada lo levanté, me baño en vomito... un desastre. Total pasamos una hora infernal, le llamé a mi hermana la doctora y me dijo que estuviera alerta de que no tuviera fiebre, ni ningún otro síntoma, el pobre vomitó un par de veces más y después de un buen rato se pudo dormir tranquilo y al día siguiente pasmos a la fase dos: la diarrea del infierno...



Total para no hacerles el cuento largo intoxique a mi hijo con queso oaxaca...
Inconsciente de $@#%&!!! dirían algunos, como se te ocurre darle queso oaxaca, pero debo aclarar que no somos muy quisquillosos con la alimentación del changuito, hemos ido tratando de que coma de todo y nunca se me ocurrió que lo iba a casi envenenar con el queso.

Me sentí fatal... cada vez que veía sus pompis rozadísimas lloraba, cada vez que lo veía triste yo lloraba más. Esta cañón el sentimiento de culpa que sentí, que aunque se que es parte de las experiencias y que no es nada grave y que lo más probable es que nos vuelva a pasar me sentí la peor madre y eso me hizo esforzarme al triple para estar con él y apapacharlo lo más que pude en esos días.

Fueron 5 días de estar mal y al sexto finalmente empezó a mejorar, hoy 10 días después tengo un changuito casi al 100%, flacucho, peo bien. Que horror. Me hizo pensar en las mamas que tienen que enfrentar enfermedades serias de sus hijos y me hizo admirarlas muchísimo, yo con diarrea de días estaba emocionalmente agotada, así que me quito el sombrero por todas aquellas mamas que lidian con eso y con aquellas que lo hacen solas. Mis respetos.

Pero bueno al final aprendí un par de cosas y se las quiero compartir:

- No envenenar a tus hijos. Aprendizaje clave.... jejejeje.

- Cuando se enferman hay que estar tranquilo, ver que tiene, tratar de calmarlo y tener mucha calma, si te ven asustada, se van a asustar ellos.

- Hay que tener muchas pijamas, pantalones y monitos, o si no tener la lavadora a mano.

- Para el colchón de la cuna, le puse pañales de adulto abajo de las sabanas, los encuentras como predoblados o cubrecamas y son lo mejor, así si el batidillo es infernal quitas sabanas, tiras ese pañal y el desastre no llega al colchón. Lo mismo hago abajo de la funda del cambiador.

- Los bebes odian el suero vía oral o pedialite que fue lo que yo le estuve dando y no los culpo, sabe horrible. Los mejores que encontramos fueron de toronja (por mucho el más rico) el de Naranja-Mandarina y el de Lima-Limón. Ahora para dárselo utilice un popote duro, tipo los de pepsilindro. Lo metía en la botella, lo tapaba y se lo ponía en un boquita para ir liberando poco a poco el dedo y que el chango fuera tragando.

- Para las medicinas que también saben horrible, lo mejor es con jeringa, sin aguja obvio como tuvo a bien recomendarme un amigo... pero si de plano no se deja, usen la pose de tortura que es muy buena para estos casos y para gripas atroces donde hay que limpiar kilos de moquitos. La pose tortura es acostando al bebé boca arriba en tu cama, te sientas con las piernas abiertas y el en medio, de forma que su cabeza queda entre tus muslos, pasas sus bracitos abajo de tus piernas y de esta manera lo inmovilizas. Sé que es horrible, pero para estos casos es muy útil y necesario, no crean que soy una bruja malvada, a mi me la enseño una amiga y van dos veces que se la he agradecido muchísimo.

- Para las rozaduras, el pediatra me recomendó tenerlo encuerado un rato... aja, si aja, encuerado con diarrea... not funny, así que lo resolví poniendo un plástico en la cuna, y toallas viejas encima, de manera que se ensuciaba una toalla y a la lavadora y así pude juntar una emocionante cantidad de toallas viejas que hace mucho no se usaban, pero sirvió.

- Para las rozaduras también, que en este caso estuvieron del terror, hice tres cosas que le ayudaron mucho, tenerlo encuerado, que le ayudo a que secaran las rozaduras, después en la tina a la hora de baño puse aceite de hammamelis en el agua, y entre pañales use una vez capent, una vez pasta de lassar y así me fui alternándolas y funciono muchísimo.

- Tener bolsas de plastico a la mano... si el desastre esta canijo lo más comodo es limpiar y tirar sin tener que correr por el bote.

- Hacerte a la idea de que vas a tallar y tallar y tallar y tallar ropa muy sucia.

- Estar en contacto con el pediatra constantemente, para irle contando como va y que te vaya asesorando de que cuidar y como.

Y por ultimo... tener mucha, pero mucha paciencia. Espero no volverles a contar de enfermedades en mucho tiempo, yo por mi parte ya le prohibí a mi hijo volverse a enfermar...










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