martes, 17 de noviembre de 2015

10 cosas en las que ser mamá me ha cambiado

El otro día viéndome al espejo me di cuenta que tengo unas ojeras que con un poco de pena admití que no se me quitarán nunca y viviré con ellas el resto de mi vida y me hizo pensar en todo lo que he cambiado desde que el changuito llego a nuestras vidas y estas son algunas cosas qué note:

1. No volveré a ver mis ojos sin ojeras... pero podré probar una montón de correctores de ojeras hasta encontrar el adecuado.

2. Ahora me visto más cómoda (y fodonga me imagino que diría mi marido), pero tengo una relación muy cercana con mis tenis... tacones... si como no.

3. Hablar en tercera persona es parte de mí... ya se, no tiene sentido, pero ahora le digo al changuito... "espérame que mamá no usa pañal", "mamá también tiene hambre", y así mamá es una tercera persona y yo cada vez menos cuerda.

4. Conocí la paciencia y los limites flexibles. Desde que nació el changuito me tiene impresionada como tus límites se van estirando y en un pasado cuando hubieras renunciado a algo, ahora aprendes a esforzarte más y más y más.

5. Me hace mejor persona o limitarme. Un buen día veníamos caminando y le digo al changuito: "Vamos a tener que ir a la tienda de la ladrona" y cuando terminé de decirlo me di cuenta que lo que había dicho y de que es justamente lo que no le quiero enseñar al chango, así que trato de ser más consciente de las cosas que digo y de los juicios que emito, lo cual no se si me hace mejor persona o por lo menos una persona más prudente.

6. Manejo mejor... Aja, me he relajado un poco para manejar, evito hacer cosas bruscas por el miedo a chocar con un changuito a bordo. También la única vez que le grité a otro coche casi lo mato del susto, así que también es algo que he ido cambiando.

7. Como mucho mejor. Una de las cosas que me han funcionado para la comida es comer juntos y tratar de que el coma lo mismo que nosotros, lo que obvio nos ha llevado a comer muchísimo más sano... ahora todos los días comemos verduras y fruta.

8. Mis uñas son un desastre... obvio hay prioridades en la belleza, primero tener tiempo de bañarse e ir al baño con calma, después peinarse y pintarse, depilarse en un hit y obvio para las uñas ya no hay tiempo ni de chiste. A mi no me vengan, todas las mamas que tienen uñas cuidadas o tienen muchacha o nana y admito que veo mis uñas y a veces las envidio.

9. Mi calidad de esposa bajo. Durante 12 años, nos fuimos a la cama y le rascaba la espalda al argentino para dormirnos, hoy tiene suerte si le digo buenas noches, cocino menos para nosotros y soy mucho menos detallista, afortunadamente él ha sido comprensivo con estas cosas y lo que sentimos sigue estando presente.

10. Que hipersensibilidad!!!! Que horror, siempre he tenido un humor negro y solía ser mucho menos sensible, ahora desde que el changuito nació, lloro hasta con los anuncio cliché, como este de Alpura Kids, que sigue la receta clásica del anuncio para mamás.

Ahora lloró con las noticias, con las películas, con la gente en la calle, con los anuncios... chale. 



Y bueno, también debo decir que conocí un nuevo tipo de amor que me llena y me hace muy pero muy feliz. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario